En la última reunión con los familiares de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa en Chilpancingo, había expectación y peso. Cuando analizamos con los papás y mamás, con otros familiares del caso, los logros alcanzados y las dificultades que impiden avanzar, y el fin del mandato del GIEI, doña Mari pidió la palabra, en nombre de otras muchas mujeres que han crecido en liderazgo en estos años de una forma que asombra, sacude y conmueve. Nos dijo: saquen todo lo que tengan, no se queden con nada. A esa demanda trata de responder este informe.
El GIEI presenta, en este su VI Informe Ayotzinapa, un panorama de los resultados globales de la investigación, así como las últimas revelaciones, responsabilidades y pruebas que amplían, tanto la perspectiva del caso como de los responsables del ataque, la desaparición forzada, las ejecuciones extrajudiciales, la tortura, el ocultamiento y desviación de la verdad. Como informe que se da en el periodo final de su segundo mandato, también incluye una perspectiva de futuro para el caso, las líneas de investigación y estrategias que pueden terminar de contribuir al esclarecimiento y la búsqueda de los desaparecidos.